Como muchos sabréis, los Pop-Up son restaurantes que se abren por un tiempo limitado y en lugares no convencionales. Pueden durar horas, días o alguna que otra semana. Luego desaparecen como si nunca hubiesen existido. Son comunes en grandes ciudades como Londres o Nueva York. Aquí en España empiezan a proliferar. Muchas veces para reinventarse en tiempos de crisis, y otras con el ansia de ofrecer algo nuevo, curioso y diferente. Es el caso del equipo de expertos en gastronomía que organiza el Titanic Pop-up en Barcelona.
Si nunca habéis estado en uno, ahora tenéis la oportunidad. Durante dos días, coincidiendo con San Valentín, podréis disfrutar de una velada de lo más romántica y original ambientada en el Titanic.
El menú, que cuesta 30€, se mantiene en absoluto secreto hasta el día del evento. Lo único que sabemos es que será a base de recetas reales de la travesía, y que, junto con la ambientación, te trasladarán a aquel abril de 1912.
El lugar donde se realizará es otro misterio. Sólo los afortunados que hayan comprado su pase lo sabrán unos días antes de vivir esta experiencia. Será en un sitio con encanto en el barrio del Raval de Barcelona.
El capitán del viaje es David Elfstrand, originario de Suecia, aprendió su oficio en restaurantes con estrellas Michelin y se formó al lado de cocineros de alto prestigio. En la actualidad trabaja en el famoso Bar Mut del Eixample de Barcelona.
La primera oficial es Bárbara Roura, formada en la escuela de cocina Hoffman. Trabajó en el restaurante Trader Vic’s de San Francisco.
La experiencia en el mundo del Pop-Up de la restauración la pone Daisy Terry quien, tras su exitoso paso por la conocida panadería – pastelería Lily Vanilli y el restaurante Moro, paradas esenciales en la capital inglesa para sibaritas, fundó “86”, una empresa especializada en la organización de este tipo de eventos.
Los organizadores piden que los asistentes al Titanic Pop-Up vayan elegantemente vestidos para la ocasión. Nos recuerdan que en 1912 no había ni teléfonos móviles ni cámaras digitales. No obstante, habrá un fotógrafo a bordo para inmortalizar el momento.
Si te apetece vivir una experiencia única y diferente puedes comprar tus “boarding pass” en http://www.ticketea.com/pop-up-titanic-kitchen
Yo ya tengo mis billetes… ¿Nos vemos allí?
Me encantaria ir a un restaurante pop up… No es caro y tiene que ser una experiencia diferente
Saludos
Aurora
Aurora, la verdad es que la experiencia fue muy chula y diferente. En el artículo de «El País» que incluí en el post hablar de varios que van a hacer. Te adjunto el link http://kcy.me/f97k Todos los que me vaya enterando los iré publicando. Un saludo!
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